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ADARRA, el amanecer del primer día del año

Catálogo de Montes: nº 1
Tiempo de subida: 1.30 h
Acceso: Besabi-Urnieta (297 m)
Municipio: Urnieta
Desnivel: 514 m
Adarra (811 m), cumbre muy popular en la comarca de Donostialdea, forma la primera de las elevaciones importantes del cordal montañero que separa las cuencas de los ríos Urumea y Leitzaran. Tal y como lo demuestran los múltiples restos arqueológicos que se han hallado en sus laderas, ha sido, desde la prehistoria, una zona muy frecuentada por los hombres y mujeres. Todavía hoy, las dos cimas gemelas de Adarra ejercen una atracción especial y convocan a multitud de montañer@s gipuzkoan@s en busca del amanecer del primer día del año.
En la carretera que une Andoain y Urnieta, desde el punto más elevado, el alto de Irurain, sube una carretera hasta el barrio de Besabi, pasando por los pastos y merendero de Xoxoka. En Besabi (0.00 h), al finalizar el asfalto, la encrucijada de caminos se resuelve tomando la pista de hormigón que sube directamente hasta el caserío Montefrío, dejando a mano derecha la pista que conduce a la cueva de Marizulo.
En las inmediaciones de este precioso caserío una verja, a la derecha, abre la senda de tierra y piedra (348 m – 10’) que permitirá el acceso a la parte superior de Adarra por la ladera norte. El camino discurre los primeros metros por el hayedo y los pastos del caserío Montefrío, pero a medida que asciende, se introduce en un hayedo. La frondosa vegetación permite, en contadas ocasiones, lanzar la mirada hacia el valle del Oria, al noroeste, o hacia Donostialdea, al norte.
La subida, suave pero mantenida, transcurre por parajes bucólicos como el que atraviesa la regata de Sorotxota (440 m – 30’) en el cual el sonido del agua, las hayas, la hojarasca y la niebla trasladan la imaginación a las fantásticas leyendas de las lamias.
Tras una pronunciada cuesta, la regata de Belabieta da paso a la explanada del mismo nombre (548 m – 50’) con magníficas vistas sobre el valle del Leitzaran. Los cerca de 300 metros de desnivel que restan hasta la cima se salvan a través de unas interminables laderas de hierbas jalonadas por conglomerados de cantos redondeados desprendidos del casco superior.
Una vez en el rellano existente entre las dos cumbres, la cima se encuentra a la izquierda sobre un núcleo de rocas calizas coronado por una cruz, un buzón y un vértice geodésico.
El descenso se puede realizar por los collados de Mantaleko Lepoa y las peñas de Aballarri, al noreste, o el de Eteneta, al sur, que enlazan con el itinerario de subida en el caserío Montefrío o en la regata de Belabieta respectivamente. De camino a estos pasos, son frecuentes los cromlechs, dólmenes y neveros, entre los cuales destaca el menhir de Eteneta.

¡Bonita excursión para dar comienzo al año!

Fotos y texto: Txusma Perez Azaceta