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VALLE DE ARAIZ, BELOKI (1.276 m) DESDE INTZA

Desde el valle de Araitz todavía quedan algunos caminos antiguos por donde los pastores suben sus rebaños hasta las praderas de Aralar. Txusma Pérez Azaceta nos propone subir, en verano, por una ruta que utilizan los pastores para llevar las ovejas a los campos de Beloki.

El pequeño pueblo de Intza, es en realidad, una suma de caseríos diseminados por la ladera de las Malloas que se agrupan en diferentes barrios. No dispone de un núcleo de referencia ya que su iglesia, dedicada a Santiago Apóstol, apenas cuenta con un par de viviendas a su alrededor. En Intza hubo un terremoto que hizo desparecer la mitad del pueblo y es por lo que los caserios estan diseminados.

En el pueblo de Uztegi ubicado en los contrafuertes desprendidos de las Malloas se rodaron algunas imágenes de la película Akelarre dirigida por el director Pedro Olea.

La ruta que describimos desde Intza hasta las campas de Beloki, atravesando el collado de Abategañe, es una de las más bellas e interesantes ascensiones que se pueden realizar a través de las Malloas. Su trazado ha tenido mucha importancia y es utilizada por los pastores durante muchos años, hoy en día lo utilizan los pocos pastores de Araitz y con esta aportación por nuestra parte queremos reivindicar la importancia que estos caminos han tenido y tienen para los habitantes de este precioso valle de Araitz.

Ascensión desde el caserío Elizalde

Desde el antiguo ayuntamiento de Intza continuamos ascendiendo por la pista asfaltada hasta alcanzar el caserío Elizalde (395 m), donde dejaremos el vehículo aparcado. Comenzamos a caminar por la pista de cemento que sube hasta el caserío Antsonegoikoa, donde finaliza el hormigón. En la bifurcación continuamos por la izquierda para girar unos veinte metros más adelante hacia la derecha y tomar un camino muy empinado donde vemos un par de hitos de piedra que señalizan la ruta.

Por unos momentos salimos del bosque aunque rápidamente nos volvemos a introducir en el arbolado. El sendero es muy evidente y por momentos nos parece que vamos caminando por una antigua calzada. Pasamos por el paraje conocido como Arratondo donde confluyen los términos municipales de Intza y Betelu. El trazado está diseñado con inteligencia ya que va salvando el fuerte desnivel con unos zig-zags que nos sirven para disfrutar de las vistas sobre las Malloas con la espectacular proa rocosa de Balerdi al fondo que se levanta sobre el valle de Araitz. Por momentos vemos que el sendero tiende a cerrarse por la maleza y es entonces cuando valoramos el trabajo de mantenimiento que realizan los rebaños como el de Peio Goikoetxea, que dos veces al año transitan estos caminos y ayudan a mantenerlos abiertos. Alcanzamos el rincón herboso donde se encuentra la fuente de Aginaga (864 m), donde aprovechamos para refrescarnos y avituallarnos. A partir de aquí comienza la parte más dura y salvaje de este recorrido con un fuerte subida por la ladera herbosa hasta el saliente rocoso de Mintxikolargañe. En este punto confluye el sendero que viene desde Errazkin por la izquierda, por medio de dos enormes fresnos. En adelante, iremos ganando la loma pegados a la divisoria que separa los términos de Intza y Betelu. Cruzamos una vieja alambrada colocada para que los animales no bajen al valle, y vamos ascendiendo entre varias dolinas, en una de las cuales todavía se pueden observar los restos de la borda de Estanga. Vamos recorriendo el alargado paso de Abatagañe (1.152 m – 1h 50 min), situado entre las cimas de Alborta (1.224 m) y Ttutturre (1.282 m). Continuamos hacia el sur por un sendero que por la izquierda se adentra en un terreno rocoso por el interior del hayedo y desemboca en terreno despejado con la vista de la cima de Beloki, a donde nos dirigimos. Llegamos hasta un poste indicador de madera situado en la pista que viene de Baraibar, por la izquierda, y comunica con Igaratza. Encaminamos nuestros pasos directamente hacia la loma herbosa de Beloki a cuya cima llegamos en pocos minutos (1.276 m – 2h 30 min).

Es una atalaya referencial sobre los rasos de Unaga donde se encuentra una pequeña laguna kárstica conocida con el nombre de Unagako potzua. El paisaje de pastizales que se muestra hacia la vertiente norte de esta cumbre contrasta en sobremanera con las extensas masas forestales que cubren la vertiente sur, hacia la carretera que sube hacia Guardetxe. Las vistas son muy amplias a nuestro alrededor, pero si fijamos la mirada hacia el noreste y justo debajo donde nos encontramos, observaremos una borda, que si coincide con la temporada estival, seguro que avistamos un rebaño de ovejas por sus alrededores. En esta txabola ubicada en las faldas del monte Beloki elaboran el queso artesanalmente una familia de pastores de Uztegi, y ello nos ha servido de referencia para realizar este interesante y clásico itinerario que comunica el valle de Araitz con los pastos de altura de la sierra de Aralar.

GUÍA PRÁCTICA

Tiempo: ascenso al monte Beloki: 2h 30 min. Total: 4h 20 min

Distancia: 10,9 km

Desnivel: 895 m

Dificultad: Alta

Mapa: Mapas Pirenaicos Sierra de Aralar. Sua Edizioak. Escala 1:25.000

Acceso: Desde Betelu, situado en la carretera entre Tolosa y Lekunberri, se accede a la localidad de Intza.

 

UNA TRADICIÓN FAMILIAR

El pastoreo es una actividad que ha pervivido en Euskal Herria durante siglos. Durante este tiempo ha estado en permanente contacto con la naturaleza y ha sabido adaptarse a los cambios acaecidos a lo largo de la historia y a los nuevos tiempos que vivimos. En la actualidad, muchas de las explotaciones pastoriles se han transformado en empresas familiares siendo la elaboración de quesos una actividad muy importante en el sector. A estas pequeñas empresas dedicadas al pastoreo y la elaboración de modo tradicional y artesano del queso les ha permitido a muchas familias el poder vivir de una manera sostenible y ejercer su trabajo en la conservación de la diversidad natural y cultural. En representación de todas estas explotaciones familiares, hemos contactado con Maider Agirrebarrena, Peio Goikoetxea y su hermano Ion Goikoetxea, que gestionan la quesería Antsonea ubicada en el pueblo de Uztegi del navarro Valle de Araitz. Durante la primavera, esta familia de pastores sube con su rebaño de ovejas latxa a través de un sinuoso y duro camino que atraviesa la muralla caliza de las Malloas para alcanzar los pastos de altura situados entre los montes Beloki y Tutturre, en la sierra de Aralar. Además de cuidar sus 400 ovejas y elaborar de manera artesana los quesos D.O. Idiazabal, realizan una buena gestión comercial para venderlos tanto directamente desde la quesería y en los mercados de la zona, como a través de su página web https://www.antsonea.com/  y acceder de esta manera a una clientela más lejana. Es así como la tradición, la sostenibilidad y la innovación hacen posible la elaboración de un producto artesano y de calidad que sirve para la salvaguarda del pastoreo, un oficio con una tradición muy familiar.